El secretario general del Partido Socialista Obrero Español, Pedro Sánchez, pronunció esta mañana una conferencia sobre la situación de las instituciones en España en la última jornada de la Escuela internacional de verano Manuel Fernández López Lito, que se viene celebrando en el Centro Cultural Antiguo Instituto Jovellanos de Gijón desde el pasado lunes.
Sánchez estuvo acompañado en la mesa por el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, quien ejerció de moderador y le presentó como la persona sobre cuyas espaldas “quieren descargar toda la responsabilidad de lo que pasa y pasará en nuestro país en los próximos años”.
El secretario general de UGT destacó que a UGT lo que le importa es el “para qué” de un nuevo gobierno y recordó el manifiesto de veinte medidas imprescindibles presentado conjuntamente con CCOO. También aprovechó para agracer a Sánchez el que “haya mantenido una posición difícil” y recordó que “a los políticos se les exige coherencia, lealtad a sus electores y al programa con que se presentan. Y Pedro desde ese punto de vista es un ejemplo”.
Tomó la palaba a continuación el secretario general del PSOE afirmando que “España necesita un gobierno limpio, social, dialogante, creíble, y ése no es el de Rajoy” e hizo referencia repetidamente a un gobierno regeneracionista, una regeneración “sobre la que puede pivotar una salida al bloqueo”.
Afirmó además que “el panorama apunta a una difícil e inmensa tarea a la que todos estamos convocados” y animó a no hacer concesiones al pesimismo “porque los grandes cambios se producen en situaciones críticas, estamos en una y estoy convencido de que saldremos bien de ella”.
Sobre la situación de las instituciones en España cree que ha aumentado la desconfianza de los ciudadanos ante ellas y también la autoconfianza de las propias instituciones en sí mismas, por lo que es crucial que ese gobierno regeneracionista que se necesita lleve a cabo una serie de reformas que Sánchez agrupó en cinco bloques: la democracia representativa, el sistema electoral, el sistema parlamentario, las administraciones públicas y el diálogo social.
Reformas en la democracia representativa
En el primer apartado, la democracia representativa, señaló que es preciso mejorar los partidos políticos porque su relación con la ciudadanía “está dañada y fomenta a desafección hacia los políticos”, de ahí que haya que actuar para mejorar, entre otros aspectos, la deficiente regulación de su estructura, financiación y funcionamiento, el excesivo poder de las cúpulas, la opacidad en la toma de decisiones y la corrupción.
En esta línea destacó que el PSOE que está “situado en una posición de avance” con elementos como la celebración de primarias, la paridad con listas cremallera, así como medidas de transparencia y lucha contra la corrupción. Sánchez sentenció que “la regeneración pasa por la regeneración del PP, algo que no sucederá hasta que deje el gobierno de España” y recordó que “la regeneración no es cosa de un solo partido, exige medidas transversales para todos”. En línea con esto criticó que «el caso del exministro Soria es el ejemplo de lo que le importa la regeneración al PP: cero».
Sistema electoral y sistema parlamentario
Expuso a continuación sus criterios acerca de la reforma del sistema electoral, que necesitará “un consenso entre los partidos para acercar a los electores a sus representantes y establecer nuevas formas de participación ciudadana”. Ésta deberá incorporar aspectos como la introducción de primarias, la regulación de los debates electorales, el desbloqueo de listas para ampliar la capacidad de elección, el voto del exterior y algunos elementos de democracia directa como la rebaja de los requisitos necesarios para la tramitación de las iniciativas legislativas populares.
En cuanto al bloque de reformas del sistema parlamentario, Sánchez señaló que “tenemos que reformar profundamente el senado para convertirlo en una cámara territorial donde las comunidades autónomas sean las protagonistas” y abogó por evolucionar hacia el federalismo, que considera “la solución más sensata para la unidad del Estado”.
También estimó fundamentales otras medidas como la regulación de los lobbies, la dedicación exclusiva de los parlamentarios para evitar casos como el de “las mordidas en los contratos públicos” de Arístegui y De la Serna, la limitación del aforamiento a los casos que tengan que ver con la vida pública y el fortalecimiento de los mecanismos de control al gobierno.
En este último punto criticó con dureza la actual situación en la que el gobierno en funciones del PP se está negando a dar cuentas al Parlamento. Del mismo modo, Sánchez hizo mención a las necesarias medidas para evitar la instrumentación que actualmente está haciendo el PP de instituciones como el Consejo General del Poder Judicial, el Tribunal Constitucional, la Comisión Nacional del Mercado de Valores, el Banco de España, Radio Televisión Espacil e inmensa tarea a la que todos estamos convocadosentaciderechos sociales y el estado de bienestar, el estado de derecho y alñola, etc., “que deberían estar al servicio de todos los españoles y no de los intereses privados del PP”.
Administraciones públicas y diálogo social
A continuación hizo referencia al “buen funcionamiento de las administraciones públicas relacionadas con la cohesión social y los servicios a la ciudadanía”, que durante los últimos cuatro años y medio “han sufrido ataques” que las han deteriorado y reiteró el compromiso socialista con su mejora.
Finalmente, habló del diálogo social como quinto bloque fundamental en el ámbito de las reformas institucionales que propone, definió como crucial el papel de sindicatos y empresarios, “que son la columna vertebral de nuestro modelo socioeconómico”, y destacó el valor de la negociación colectiva, “mejor que la regulación estatal” pues las reformas fruto del acuerdo “son las que se implantan con mayor garantía de éxito”.
Además Sánchez destacó que “sin los sindicatos, los derechos laborales simplemente no existirían” y puso de relieve que la función que desarrollan no sólo es para los afiliados, sino que “se generaliza a gran parte de los trabajadores”. Entre los compromisos del PSOE está la derogación de la reforma laboral del PP, desarrollar una ley de participación institucional que clarifique el papel de los sindicatos y la puesta en marcha de un nuevo Estatuto de los trabajadores.
Reforma de la Constitución
Finalmente, señaló que por encima de estos cinco bloques, la reforma constitucional tendrá un gran impacto en la regeneración y desgranó algunas propuestas en esta materia, como el fortalecimiento de los derechos sociales y el estado de bienestar, el estado de derecho y algunos derechos fundamentales, la calidad de la representación política y la puesta al día del estado autonómico hacia fórmulas inspiradas en países de nuestro entorno como Alemania. “Una España federal en una Europa federal”, resumió al tiempo que llamó a rescatar el espíritu de la transición”.