Asturias cerró el año 2018 con un descenso del 4,9% en el paro registrado que se sitúa en 72.804 parados. Esta caída se sitúa por debajo de la media nacional (-6,2%) y entre los cuatro menores descensos dentro del panorama autonómico.
La precariedad laboral ha seguido siendo la tónica dominante del mercado, donde el 92% de los contratos son de carácter temporal, es decir, por cada contrato indefinido registrado en diciembre se han producido 11 contratos temporales, y ello a pesar del avance interanual de la contratación indefinida (+10,53%) frente al descenso de la temporal (-1,55%).
Asimismo, las diferencias de género siguen resaltando en el mercado de trabajo, de forma que las mujeres concentran mayoritariamente las cifras de desempleo (el 56% del total regional) además de arrojar una caída interanual del 3,5% mucho menos intensa que la de los hombres, el -6,6%.
Cabe señalar cómo la cobertura frente al desempleo sigue a mínimos, y menos de la mitad de los parados, el 45%, recibe algún tipo de protección económica.
Con todo, en la UGT de Asturias insistimos en la necesidad de eliminar los efectos más nocivos de la reforma laboral del 2012, causante de los principales desequilibrios de nuestro mercado laboral. Resulta más que evidente que con precariedad laboral y bajos salarios resultará imposible lograr un crecimiento económico sostenible y sólido. Además, es necesario reforzar la protección frente al desempleo para dar una mayor cobertura a los parados y paradas
Asimismo, es necesario dignificar los salarios y las condiciones laborales, y para ello es preciso que la organización patronal actúe con responsabilidad y compromiso, cumpliendo lo acordado en el ámbito de la negociación colectiva en el actual IV AENC.