El 16 de abril se estableció el día de la esclavitud infantil para conmemorar la muerte de Iqbal Masih que fue asesinado a los 12 años por revelarse contra su vida de esclavitud, convirtiéndose en el símbolo de la lucha contra la esclavitud infantil. Han pasado 30 años y la esclavitud infantil sigue siendo una realidad inaceptable.
La esclavitud infantil es una de las violaciones más graves de los derechos humanos en pleno siglo XXI. Estos niños y niñas suelen vivir entre violencia, abusos sexuales y pobreza extrema, son tratados como objetos, de una forma totalmente deshumanizada, esta situación destruye su infancia y les deja secuelas físicas y psíquicas para el resto de su vida.
Hay diversas formas de esclavitud infantil, las niñas y niños esclavos son vendidos, en muchas ocasiones, por sus propios padres a personas sin escrúpulos que, a su vez, los venden a otros o los explotan de diferentes formas que van desde el matrimonio forzoso, el ejercicio de la prostitución, trata de niños, trabajos forzosos en minas y otras actividades de gran peligro, su uso como carne de cañón en las guerras como niños soldados, esclavos domésticos, e incluso, como un mero medio de pago para saldar una deuda. Un menor que es víctima de esclavitud infantil tiene pocas posibilidades de escapar de la pobreza y de la exclusión social en la que se encuentra.
Las causas de la esclavitud infantil son varias, entre ellas destacan: pobreza extrema, falta de acceso a la educación, conflictos y crisis humanitarias, corrupción y falta de regulación, demanda de trabajo infantil, ausencia de políticas de protección efectivas.
Las cifras son inaceptables, pero no pensemos que la esclavitud infantil solo afecta al tercer mundo, sino que, por desgracia, sus tentáculos alcanzan cada rincón que podamos imaginar, así incluso en Europa, aunque no es tan visible, el tráfico de menores con fines de explotación sexual y laboral sigue siendo una triste y penosa realidad.
Desde UGT consideramos que la erradicación de la esclavitud infantil es una lucha prioritaria que debe abordarse desde el compromiso sindical, la acción política y la sensibilización social.
Mantenemos un firme compromiso en la lucha contra la esclavitud infantil, tanto a nivel nacional como internacional, nuestras acciones se centran en: denuncia y sensibilización, a través de campañas y acciones sindicales, visibilizamos la realidad y exigimos a gobiernos y empresas medidas contundentes para erradicarlas; promoción de políticas de empleo digno, apostamos por el fortalecimiento de políticas públicas que garanticen trabajo decente para los adultos; defendemos la educación universal y gratuita, la educación es clave para prevenir la esclavitud infantil, exigimos inversión en educación y el cumplimiento de los derechos de la infancia; regulación y control en las cadenas de producción, luchamos para que las empresas cumplan con normativas laborales justas y transparentes, asegurando que los productos no se fabriquen con trabajo infantil; cooperación internacional, colaboramos con sindicatos, ONGs y organismos internacionales para combatir la esclavitud infantil en todo el mundo.
Sabemos que, por desgracia, aún queda un largo camino por recorrer para lograr la eliminación de esta lacra, es fundamental que los gobiernos asuman su responsabilidad y adopten medidas efectivas para erradicar la esclavitud infantil. Algunas de las propuestas clave que defendemos desde UGT son: endurecimiento de las leyes contra la explotación infantil, reforzando la legislación y garantizando su cumplimiento; mayor inversión en educación y protección social, pues defendemos que la educación tiene que ser una prioridad, asegurando que ningún niño tenga que abandonar la escuela para trabajar e hipotecar su futuro; responsabilidad empresarial, las empresas deben asumir un compromiso real en la eliminación del trabajo infantil; participación sindical en la vigilancia del cumplimiento de los derechos laborales, los sindicatos desempeñamos un papel clave en la denuncia y prevención de la explotación infantil.
Los esfuerzos para eliminar la esclavitud infantil y alcanzar otros derechos laborales deben ir de la mano, tienen que ser asegurados derechos como la libertad de asociación y de negociación colectiva, la no discriminación en el empleo y la ausencia de trabajo forzoso.
La erradicación de la esclavitud infantil, debe de ser no solo un objetivo, sino un compromiso de toda la sociedad. Los niños y niñas como personas que son, tienen que disfrutar de sus derechos inherentes, pero también, como niños y niñas que son, tienen que poder disfrutar de la infancia, un periodo en el que lo que debe primar es estudiar, jugar, reír y, en definitiva, ser feliz.
Ana Isabel García Roza
Secretaria de Política Social de UGT Asturias.
