En el mes de julio el paro muestra un nuevo descenso interanual en Asturias: 9% (7.240 desempleados menos) y en línea con la media del país (9,4%) lo que nos sitúa en puestos intermedios en el ranking autonómico.
A nivel sectorial, todos presentan caídas del paro destacando en términos absolutos el sector servicios con cerca de 4.200 parados menos, que representa el 57% de la caída total. Le siguen la construcción y la industria.
La caída del desempleo viene impulsada por la campaña de verano lo que supone que la mayor parte del empleo creado es temporal. Del total de contratos registrados el 94% es temporal, lo que arroja una ratio de un contrato indefinido por cada 16 temporales.
Las diferencias de género vuelven a ponerse de manifiesto en el mercado laboral, debido a que las mujeres se están viendo menos favorecidas por el descenso del paro, donde la caída de los hombres (12,4%) duplica a la de las mujeres (6,2%). Esto hace que el peso del desempleo femenino aumente hasta suponer el 56% del paro total. Además de las mujeres, otros colectivos como los jóvenes o los mayores de 55 años no se están viendo favorecidos por la creación de empleo, por lo que deben ponerse en marcha planes de choque que combinen prestaciones económicas con formación e itinerarios que mejoren su inserción laboral.
Los datos de afiliación a la Seguridad Social muestran una subida del 2,3% (en torno a 8.300 afiliados más), nuevamente un crecimiento menos intenso que la media (3,6%).
Las tasas de cobertura continúan descendiendo y a día de hoy el 53% de los desempleados ya no tiene derecho a prestación. Ante esta situación debe reforzarse la protección social y poner en marcha de manera urgente la prestación de ingresos mínimos para rescatar a estas personas de la pobreza y la exclusión social.
Desde la UGT demandamos una reforma del sistema de prestaciones contributivas y asistenciales para hacerlo más inclusivo y extenso. Así como una apuesta por los Servicios Públicos de Empleo.
A nivel regional deben reforzarse las medidas de fomento de empleo, en el ámbito de la concertación regional, especialmente las dirigidas a los colectivos más vulnerables como mujeres, mayores de 55 años y jóvenes.