La EPA del segundo trimestre del año arroja unos datos favorables impulsados por el arranque de la actividad productiva y el final de las restricciones más severas. Con todo el mercado laboral parece tomar fuerza, si bien debemos estar atentos a los efectos de la quinta ola.
Con todo, se produce una incorporación de nuevos activos, algo a lo que no estamos acostumbrados en Asturias que viene padeciendo un goteo permanente de actividad. Si bien, en esta ocasión las buenas expectativas del mercado laboral pueden estar animando a nuevas incorporaciones en busca de un empleo. Así, tanto respecto al segundo trimestre del año anterior (inmerso en plena pandemia) como también en lo que va de año 2021, aumenta la población activa en un 3,7% y 0,6% respectivamente.
Se produce asimismo un importante avance de la ocupación y si bien cualquier comparativa interanual va a estar significativamente afectada por la situación pandémica del pasado año, la clave, en esta ocasión, es comprobar que a lo largo de este año 2021 la evolución resulta favorable para la creación de empleo. Así, respecto al primer trimestre la ocupación avanza en 4.200 personas, mientras el paro desciende en 1.600 desempleados (un -2,5%), retrocediendo a su vez la tasa de paro hasta el 13,6% que se sitúa además por debajo de la media nacional.
El sector más vigoroso en la creación de empleo resulta ser la construcción mientras que el sector industrial, si bien mejora en lo que va de año, experimenta una caída del empleo en términos interanuales que contemplamos con preocupación y nos hace reivindicar una vez más la necesidad de impulsar una política industrial, clave para el futuro de Asturias. Por su parte el sector servicios mantiene en lo que va de año los niveles de empleo.
Cabe señalar una vez más la situación marginal de las mujeres en el mercado laboral, de forma que se mire por donde se mire, los datos siempre arrojan un peor comportamiento entre este colectivo frente a los hombres, tanto en términos de empleo, de ocupación o de actividad, por no hablar de brecha salarial. Esta situación se agrava si además de ser mujer se es joven, donde la tasa de paro entre las mujeres menores de 25 años experimenta una escalada hasta alcanzar el 50,8%.
Los jóvenes, en general, con una tasa de paro cercana al 39% nos preocupan especialmente. Una generación que ha sufrido y sufre los efectos del covid en varias facetas de su vida (laboral, social, emocional, psicológica..) y que en el acceso al mercado de trabajo se encuentran con dificultades y precariedad que les impide llevar cabo un desarrollo vital. Es preciso por ello poner en marcha políticas activas de empleo para este colectivo, ofrecerles trabajo y un futuro estable.
Hay que destacar también como se produce un aumento de los parados de larga duración, donde casi la mitad de los desempleados se encuentran en esta situación desde hace más de un año, lo que nos indica a su vez la necesidad de reforzar los niveles de protección frente al desempleo.
Para concluir, desde UGT Asturias queremos señalar como a la vista de estos datos y ante las perspectivas de una reactivación del mercado de trabajo es el momento ineludible de llevar a cabo la inaplazable derogación de la reforma laboral; el incremento del Salario Mínimo Interprofesional y del impulso a los salarios. No debemos permitir que una vez más las salidas de las crisis se salden a costa del esfuerzo de la clase trabajadora. Así mismo insistimos en la necesidad de terminar con las diferencias de género en el mercado laboral, con la discriminación de los jóvenes y con el empleo precario.
Desde Asturias debemos afrontar la era poscovid con nuevos acuerdos de concertación regional que nos permitan crecer de forma justa y sostenible.